domingo, 7 de febrero de 2010

Ella y él


Ella ya no lo ama como antes. Presiento que está desilusionada porque esperaba más de la relación. Sospecho que está defraudada de la vida que lleva con él, nada comparado a lo que le prometió. Él ya no la engríe como antes, ya no llena de besos su rostro blanco, siempre llega tarde y a veces llama para avisar. Él tiene otra mujer que no es tan linda como la que tiene en casa. Él no ama a esta acompañante ocasional, solo desea su cuerpo. Por momentos se siente mal de engañar a la chica de sus sueños, pero sus instintos ganan el partido frente a sus sentimientos.

Ella no se queda atrás. No juega al engaño como él, pero sale por las noches de vez en cuando con un chico que se convirtió en su amigo clandestino, ese al que llamas solo cuando quieres vengarte del verdadero amor, ese personaje capaz de recibir tu despecho, sin mayores aspiraciones, sin ninguna esperanza. Ella sale con su amigo conveniente y él con su acompañante nocturna. La primera pareja termina siempre en el mismo bar. La segunda, termina siempre en el mismo hotel. Ella y él, al final de la noche o a la mañana siguiente acaban en la misma cama, con el mismo beso de buenos días y con la misma rutina insalvable.

Ella no quiere dejarlo porque aun lo ama un poco y porque no puede vivir sola en esta gran ciudad. Él también la ama, pero no puede dejar de ser como es (eso es siempre lo que dice). A fin de cuentas ambos son felices cuando comparten un domingo en casa. Eso borra todo el dolor y el sufrimiento de la semana, borra los besos mentirosos y esas salidas de las que ninguno habla, porque son felices así.


Ella vive sola en un país que no conoce. Extraña al amor que dejó en su país. Él también la extraña, pero se las ingenia para llevar la pena. Ella le promete regresar pronto, pero él no le cree del todo. La ama, pero sabe que la realidad pinta un color gris. Ella se fue hace más de un año. Se fue porque no tenia otra salida, porque sus padres la obligaron a irse, porque dependía de ellos, porque su hermana es una arpía que todo lo maneja con su carácter imperativo, opresor. Él se quedó sin poder retenerla, porque no tiene los medios, porque es débil y no pudo contra la hermana arpía, porque se equivocó de vida, porque el amor a veces no puede con todo o porque la ama con el corazón que no tiene.

Ella sale con un amigo del trabajo. Él sale con una amiga comprometida pero infeliz. Ella solo quiere bailar y recordar el amor que dejó atrás. Él solo quiere volver a amar a alguien que le haga olvidar su pasado. Ella besa a su amigo del trabajo pensando en su antiguo amor. Él se enamoró de su amiga comprometida. Ella no quiere terminar en un hotel, porque prometió que nadie tocaría su alma. Él quiere besar a su nueva amiga para olvidar a su amor viajero.


Ella sigue presa en su primer amor. El sabe que puede contar con ella. Ella no lo olvida porque no quiere hacerlo, porque guarda la esperanza de que todo vuelva a ser como antes. Él la cita en el lugar de siempre, en el hotel donde por primera vez hicieron el amor. Ella no quiere, pero acepta, porque quiere verlo, porque aún lo ama. Él se siente culpable porque ya no la ama, porque se olvidó de ella hace años y sólo la busca por complacer sus fantasías. Ella aún le escribe mensajes preocupados y tiernos. Él la ofende con llamadas insinuantes y groseras. Ella sólo quiere conversar con él, hablar de cualquier cosa, recordar viejos tiempos. Él sólo quiere matar sus deseos, hacerla suya una vez más. Ella sabe que él no la ama, pero se arriesga, porque nunca amó como aquella primera vez. Él es un canalla enamoradizo, que la ama, pero a su manera.


Ella lo dejó por su mejor amigo. Él todavía la ama pero no puede pisotear su orgullo. Ella se enamoró, sin querer, del confidente incondicional. Él lamenta no haber sido más precavido e intuir las intenciones de su mejor amigo. Ella dejó de amarlo cuando sospechó que él le era infiel con una chica alta, voluptuosa. Él le pedía hacer el amor, pero ella no quería, porque inconscientemente imaginaba cómo él se revolcaba en la cama con la chica alta y voluptuosa. Ella está feliz con su nuevo amor. Él quiere matar a su ex mejor amigo. Ella grita a los cuatro vientos que tiene nuevo novio. Él se siente engañado, traicionado, pero se consuela con su chica alta y voluptuosa. Ella hace el amor con su nuevo novio. Él sigue tirando con su chica, pero todavía piensa en ella, a veces.


Ella tiene novio y él, novia. Él pasa a recogerla a su casa en taxi. Ella dice que saldrá con sus amigas, pero sale con él. Él la lleva a un hotel y hacen el amor. Ella fuma marihuana y le cuenta que su novio ya no tiene tiempo para tirar. Él se siente triste por engañar a su novia, pero se mete al jacuzzi. Ella le cuenta con quién perdió su virginidad. Él se le tira encima y termina, no quiere escucharla. Ella se fuma otro porro y le dice que no se cuidó. Él le da esas pastillas milagrosas y la lleva a su casa. Ella no paga el taxi, sabe que todo es gratis. Él paga todo y sabe cómo cobrarse. Ella se despide con una pregunta: ¿nos vemos mañana? Él le responde: sí, a las diez, en el hotel de siempre.


Ella acaba de terminar una relación. Él está solo porque su novia lo terminó. Ella quiere estar con él. Él acepta porque no le gusta estar solo. Ella olvida a su antiguo amor y se embarca en una nueva aventura. Él no la ama desde el comienzo, pero aprende en el camino. Ella habla mucho. Él, poco. Ella habla mucho de su ex. Él no habla de sus ex, porque lo ponen triste. Ella le cuenta sus secretos de alcoba. Él no quiere saberlos, porque le dan nauseas, no quiere imaginar lo que otro hombre hizo en su lugar. Ella lo cuenta todo. Él la ama menos cada día, pero le gusta tirar con ella. Ella piensa que lo tiene amarrado, cree que sabe mucho del amor y de sus laberintos. Él solo quiere estar con alguien, quien sea. Ella sigue hablando de sus ex. Él ya no aguanta más. Ella tiene muchos pretendientes, dice. Terminan. Ella llora sólo un día, luego se lava la cara y sale a pasear. Sabe que siempre hay un pretendiente más; en fin, lo importante es tener a alguien con quien tirar.

6 comentarios:

  1. No me gusta el formato,pero el artículo es llamativo.Mejora la cadencia narrativa,please.

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  2. Felicitaciones por tu blog reloaded,un abrazo.

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  3. Muy bueno amigo! Un abrazo!

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  4. Me recuerda a esas etapas en las q los q quisimos pasamos, alguna vez...la pregunta es ¿podremos regresar?

    Manlley

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  5. tipico de quien conocio al amor en un hotel, frio, ajeno y reutilizable.

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